¿Cuánto estás cuidando la salud de tu propuesta de valor?

Por Mariano Barusso | 23 de mayo, 2023

Quienes creamos, desarrollamos y/o gestionamos negocios tenemos muy presente el imperativo de renovar constantemente la propuesta de valor para anticiparnos o acompañar las mutaciones del contexto.

Como clientes, lo tenemos mucho más claro aún, y tomamos decisiones regularmente respecto de con cuáles proveedores continuar, junto a cuáles crecer o a quienes dejar ir, tanto para nuestra empresa como para nuestra vida cotidiana.

Donde observo que se pone más opaco este tema es, por un lado, a nivel de las áreas de servicio en su relación con las áreas de negocio. Muchas veces mantienen un enfoque por actividad o por producto/servicio confiadas de su vigencia, aunque se esté desacoplando de la evolución de la demanda de los clientes de sus «socios» internos.

Eso nos llevó a desarrollar un modelo de madurez cliente céntrica que incluye esa idea de enfoque «por actividad», como un eslabón previo al enfoque «por producto», que los modelos clásicos consideraban como primer estadio en la madurez cultural y operacional hacia la centralidad del cliente. Porque hay áreas de servicio que ni siquiera tienen claros cuáles son los productos o servicios que así son concebidos por sus clientes. ¿En serio? Sí.

Sin embargo, donde más se opaca la consciencia respecto de la propuesta de valor es en los grupos de conducción y en los líderes que los integran. Es bastante habitual que no conciban su trabajo como un servicio multistakeholder del cual depende su legitimidad, vigencia y valor agregado. Generalmente, cuidan mucho la satisfacción de sus jefes y de una buena estadía en El Olimpo, luego de tantas guerras conducidas para llegar a ese lugar.

Liderar es un servicio, no un rol o un cargo. Por lo tanto, cuidar la salud y el desempeño de nuestra propuesta de valor como líderes requiere la misma atención que le damos a nuestra salud personal.

Claro, no todos le prestamos la misma atención a la salud, aunque sí es cierto que lo hacemos cuando nos conectamos con la finitud y el sentido de vivir. Con la propuesta de valor pasa lo mismo: va a morir como toda institución y es, a la vez, la fuente de sentido para nosotros y junto a aquellos a quienes servimos.
¿Cómo están los exámenes clínicos de tu propuesta de valor y la de tu equipo? ¿cómo van con la prevención y el tratamiento? Acuérdate que no se trata de perdurar, sino de servir bien… y que los clientes somos implacables.

Si te resonó, conversemos.

Mariano Barusso | Es Director General de Asertys, Consultoría en efectividad y transformación organizacional.

Asertys, 2023 / © Todos los derechos reservados.